La ahorcada María

La Ciudad de México es una de las mas antiguas del país, con edificios de mas de 100 años que albergan entrañables y fantásticas historias, para convertirse con el paso de los años en las leyendas que nos cautivan al visitar estos lugares; algunas se recuerdan con más folklore que otras, y estas historias junto con la antigüedad misma, terminan formando parte del patrimonio de estos monumentos.

El ex convento de monjas más antiguo de México fue fundado en 1540 por Fray Juan Zumárraga, primer arzobispo de México.

Ubicado en Belisario Domínguez y República de Brasil, Centro Histórico; El conjunto original estuvo formado por varios edificios, el noviciado, el edificio principal del convento y el templo.

Aquel convento fue testigo de una desesperanzadora historia, embalada de lujuria y mentiras.

La leyenda se ambienta en el siglo XVI cuando María de Alvarado, una joven hija de renumerada familia perteneciente a lo mejor de la sociedad en su tiempo, conoce a un joven de posición social bastante inferior a la suya, un joven llamado Joaquín Urrutia, este se dedicaba a arreglar las cosas dañadas y de cuando en cuando platicaba con María, ella no tardo en caer perdidamente enamorada de él.
Joaquín por otra parte se sentía dichoso de tener enamorado a una dama procedente de una buena familia con altos recursos económicos, sus intenciones no eran otras que utilizar a María para cambiar su vida, los hermanos de María (Gil y Alonso) al enterarse de sus pensamientos actuaron inmediatamente, ellos decidieron ofrecerle dinero, una buena cantidad para que este no pudiera negarse y salir de inmediato de la ciudad, Urrutia ante la posición económica que se encontraba no dudo y tomo el dinero.
La noticia que llego a los oídos de María fue que su amado había muerto, esto la destrozó y sin mucha voluntad María entró al convento, sin dejar de llorar su pena de amor. 

Con el paso del tiempo María desconsolada, tomo una soga y se aproximó a un árbol de duraznos cerca de una fuente y se colgó. No tardo mucho para que María en pena, apareciera por las noches y aterrorizara el convento con su imagen en el reflejo del agua de la fuente donde también se veía el árbol de duraznos.
Seguidamente se prohibió la salida por las noches, se talo el árbol y se quitó la fuente, pero a María aún se le ve rondando en el jardín.